La opción del "container-home" sigue siendo económica y suma puntos con el medio ambiente

Es cada vez más creciente la demanda de contenedores marítimos que son adaptados para oficinas, vestuarios, obradores, talleres, y demás actividades vinculadas principalmente a la actividad de la construcción, pero también se ven cada vez más en jardines y terrenos de balnearios. Guillermo Portela es encargado de Sales & Marketing de Muelle Oriental una de las empresas que están haciendo punta en el negocio. Nos cuenta que además del uso para la construcción hay otras dos patas fuertes en el rubro de los contenedores modificados: la actividad agrícola y las personas físicas, “que de a poco se van animando a tomar como una opción el hacerse una vivienda permanente o temporal con uno o más contenedores marítimos”.

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La principal ventaja de esta opción es el tiempo de construcción ya que podés tener una casita de 30 metros lista para estrenar en menos de 30 días. Pero también pesan el costo, que oscila entre US$ 400 y US$ 700 el metro cuadrado; la posibilidad de mover el módulo de un punto geográfico a otro con un costo operativo razonable y rápido; y por último un factor ecológico, ya que se está reciclando una estructura de acero y madera que cumplió con su vida útil en su rubro y se transforma y recicla para pasar a cumplir otro fin. Los precios de los contenedores varían según su tipo pero Guillermo los ubica “entre US$ 3.000 y US$ 5.400 aproximadamente, ya que hay que tener en cuenta no solo el tipo sino el año de construcción y por lo tanto el estado”. En Muelle Oriental no solo venden el contenedor sino que ofrecen el asesoramiento y la logística para posicionarlo correctamente en el terreno.

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