Ahora quienes representan a los trabajadores no pueden ser despedidos
Heberu: “Si no confundimos libertad con libertinaje, vamos por buen camino, si la elección de ese representante no es el que menos quiere trabajar y participan los dueños de ese emprendimiento, que fueron los que arriesgaron su capital y los que asumen las pérdidas y ganancias y están compenetrados en repartir sus utilidades con los que la generan conjuntamente con ellos. Existe en el Uruguay una empresa multinacional, dentro del rubro metalúrgico, que no está afiliada a ningún sindicato, pero posee formas de amparar a sus trabajadores como socios minoritarios y funciona, porque se entiende que el propietario arriesgó y puso su capital generando opciones de desarrollo para los uruguayos, los que trabajan no son enemigos de sus empleadores, son socios en un devenir mejor para todos. Tampoco nosotros los empleados debemos pensar, que tengamos las ganancias sin poner un solo riesgo”.