El punto de partida son el lugar y las herramientas tecnológicas: intentá conseguir un espacio privado y con iluminación adecuada. Los fondos de pantalla o difuminación son un buen recurso para mantener la privacidad. Corroborá que tengas buena conexión a internet; en caso de que no, desconectá otros dispositivos durante ese momento y avisá a las personas con las que convivís que tendrás la entrevista.
Instalá y actualizá la aplicación que utilizarás, para evitar distorsiones o retrasos. Asegurate de que tu cámara y micrófono estén configurados y que funcionen. Cuando comience la videollamada, guardá una distancia prudente de la cámara, de modo que el rostro sea visible pero no tan alejado ni tan cercano al dispositivo.
Por otra parte, recordemos que sigue siendo una instancia de entrevista: debemos cuidar nuestra apariencia y brindar una imagen prolija y profesional. Tené a mano lo necesario para tomar notas y el CV que enviaste. Anotá preguntas para formular cuando tengas la oportunidad, así como la información que encontraste sobre la empresa (si sabés cuál es). Es bueno practicar previamente posibles preguntas, tener un orden claro de lo que es relevante contar sobre vos, mostrarte proactivo y demostrar una comunicación ágil y organizada.
Asegurate de tener el nombre, celular o email de la persona con quien tendrás la entrevista, para avisar posibles retrasos o imprevistos; esto muestra respeto del tiempo del otro y tu compromiso con el proceso de selección. Finalizada la entrevista, te recomendamos enviar un mail agradeciendo y así seguir en contacto con el entrevistador.
Por:
Geraldine Delfino, senior manager de Selección de Personal de PwC Uruguay.
Natalie Royes, senior de Selección de Personal de PwC Uruguay.