El estudio detalla que la segunda mitad de 2024 se perfila como un periodo dinámico para las fusiones y adquisiciones, impulsadas por la consolidación estratégica, la optimización de carteras, el impacto de las normativas internacionales y el énfasis en la sostenibilidad y seguridad energética.
Vemos como también se destaca el hecho de que en el sector de minería y metales se espera que las empresas continúen asegurando el suministro de minerales críticos para la transición energética, mientras que, en el caso del petróleo y gas, se prevé un fuerte movimiento de consolidación, a medida que las empresas buscan diversificar sus activos y generar sinergias.
De igual forma, el informe revela que casi el 60% los CEO de las empresas consultadas esperan que las regulaciones gubernamentales impulsen importantes cambios en la forma en que sus empresas generan, entregan y captan valor en los próximos tres años. Asimismo, el estudio detalla que se está evidenciando una reconfiguración de la industria en los sectores de la energía, los servicios públicos, los recursos y los productos químicos. Estos cambios están impulsados por un claro interés en la seguridad de las cadenas de suministro, la optimización de la cartera de productos y la adaptación a unos incentivos y normativas gubernamentales, cada vez más amplias.
Como sucede tradicionalmente en nuestro país, los compradores extranjeros continúan siendo protagonistas a la hora de realizar adquisiciones. En este sentido, vemos como estas transacciones representaron la mayoría del volumen total de las operaciones, siendo Estados Unidos el inversor extranjero con mayor presencia, seguido por Reino Unido y Brasil.
El estudio también resalta que la sostenibilidad es un impulsor fundamental en las decisiones de inversión, ya que las empresas están priorizando proyectos que les permitan reducir su huella de carbono, aprovechando los incentivos gubernamentales tanto en Estados Unidos como en Europa.
En este sentido, sectores como Tecnología, Energía, Consumo y Agronegocios que ya se encuentran consolidados en Uruguay, siguen siendo generadores naturales de transacciones. La exportación de servicios y talento en materia de tecnología, la diversificación energética uruguaya con el desarrollo del Hidrógeno Verde coloca a nuestro país como un destino atractivo para las industrias del rubro, así como a los sectores conexos en la cadena de suministros.
Es así como debido al repunte de los mercados bursátiles, la baja de los niveles de inflación y de las tasas de interés, además de la necesidad que tienen muchas compañías de adaptar y transformar sus modelos de negocio, creemos que existen oportunidades importantes para aquellos que piensen en el corto, mediano o largo plazo, vender o abrir el capital de su empresa, lo que, sin duda, permitirá que se continúen fortaleciendo los sectores más estratégicos de nuestra economía.