Ronda surgió de la mano de tres madres que habían notado justamente eso y que ahora son intermediarias de unas 500 proveedoras. En su primer año de nacimiento, ya lograron recircular más de 12 mil artículos de primeras marcas y en perfecto estado a través de su tienda https://ronda.com.uy/.
Agustina Quartino, Brenda Rosales y María Eugenia Masoller crearon Ronda en 2020. “El consumismo que existe en torno a los chicos tiene un impacto fuerte en el medio ambiente por lo que la reutilización nos pareció una excelente solución. Las tres somos mamás y, como le pasará a la mayoría, vimos que la cantidad de cosas que los chicos casi ni usan o directamente no llegan a usar es impresionante. En sus primeros dos años, los chicos usan hasta siete talles diferentes, sumado a todo el equipamiento que hay en el mercado y que las mamás nos vemos tentadas a comprar”, dicen.
Las tres venían del mundo del retail y se lanzaron con su emprendimiento, con una excelente respuesta: “Una vez que las clientas reciben el producto y ven que realmente no hay diferencia con comprarlo nuevo, vuelven a comprar. Tenemos una tasa de más del 60% de clientas habituales”.
La clave de su negocio está en el precio, la calidad y presentación de las prendas: “Todavía existen preconceptos de la ropa usada y por eso en Ronda el filtro que hacemos es súper estricto. Nuestro objetivo es que los productos que aceptamos estén impecables y que la gente le pierda el miedo al second hand. Apostamos a que en un futuro más gente se de cuenta que comprar usado es aún mejor y lo vea como una solución para contribuir con el planeta”, dicen. Las prendas se venden hasta 70% más baratas que el precio de origen.
“Venimos con un crecimiento sostenido y cada mes se suman más y más proveedoras. Hoy en día tenemos unas 500 proveedoras y llevamos más de 12.000 artículos recirculados de una familia a otra”, cuentan las emprendedoras.
“Queremos generar un impacto significativo en nuestros hijos enseñándoles el valor de reusar, reducir y reciclar convirtiéndolos en los consumidores responsables que el futuro precisa”, cierran.