Según un informe del Monitor de Opinión Pública realizado entre febrero y marzo, un conjunto de preocupaciones económicas suman el 44% como principales problemas del país. Dentro de estas temáticas, lidera ampliamente el desempleo, seleccionado como principal problema por un 26% de los uruguayos.
“El resto son preocupaciones que alcanzan guarismos similares: pobreza 7%, bajos salarios 6% y costo del estado 4%. La preocupación por la delincuencia aparece por primera vez en tercer lugar en los últimos 3 años, siendo mencionada por un 18% y desplazada por el coronavirus, que registra un 20% de las respuestas (máximo de nuestras mediciones desde la llegada de los primeros casos de COVID-19 al país). Dado que la medición se realizó mayormente en la última semana de febrero, es factible que en la actualidad la preocupación por el coronavirus haya incluso crecido algunos puntos, en vista del incremento de los contagios y decesos por COVID-19, así como por el riesgo de saturación del sistema de cuidados intensivos”, dicen.
“Si observamos la serie histórica 2019-2021, constatamos que el cambio central en el mapa de expectativas ocurre en el segundo trimestre de 2020, a partir de la instalación de la pandemia en el país. Allí, se produce un triple fenómeno: el coronavirus ingresa en la agenda de preocupaciones ciudadanas, la preocupación por la delincuencia experimenta una abrupta caída y, de la mano de la problemática del empleo, crecen varios puntos las preocupaciones económicas. En tanto, al comparar los dos últimos trimestres, constatamos que el cambio principal es el crecimiento de la problemática del coronavirus y un nuevo descenso de la preocupación por la inseguridad, manteniéndose estable el conjunto de preocupaciones económicas. Como salvedad, vale aclarar que los datos del último trimestre de 2020 corresponden a octubre, antes del pico de la primera gran ola de contagios en el país. Por otro lado, pese a su caída relativa, hay un 21% de los uruguayos que señala a la delincuencia como segundo problema principal del país (es decir, 4 de cada 10 uruguayos posiciona a la delincuencia como uno de los dos problemas principales del país)”, explica el estudio.
Fuertes variaciones en las preocupaciones ciudadanas según perfil político y generacional:
“Desagregando la información según voto en primera vuelta, se encuentran diferencias apreciables entre el bloque de electores de alguno de los partidos de la Coalición Multicolor y el conjunto de adherentes del Frente Amplio. Es 27 puntos más alto el porcentaje de frentistas que eligen alguna temática económica como principal problema del país, 61% contra 34% de los electores multicolores. En todas las demás preocupaciones, es superior el porcentaje de multicolores, 9 puntos más respecto a la temática de la inseguridad, otros 9 puntos de diferencia en cuanto al coronavirus, 5 puntos respecto a la educación y otros 5 puntos en relación a la corrupción”, dicen.
Según indica el informe, “los dos grandes bloques de electores con que cuenta el país tienen acentos diferentes en valores que impactan directamente en las expectativas ciudadanas”. Por ejemplo, ambos bloques sostienen miradas diferentes sobre la desigualdad socioeconómica, lo que a su vez se asocia con brechas en los porcentajes que ubican a la pobreza como principal problema del país (en nuestra medición de febrero, 14% de los frentistas señala a la pobreza como principal problema contra 4% de los electores multicolores).
Sin embargo, es probable que algunas de estas discrepancias entre frentistas y multicolores también deriven de su diferente conformación generacional.
Cuando observamos las preocupaciones ciudadanas a la luz de 3 grandes franjas etarias, constatamos efectivamente que el segmento de adultos jóvenes (donde el FA tiene particular ascendencia), es aquel que otorga mayor centralidad a los problemas económicos.
55% de los adultos jóvenes menciona las temáticas económicas como principal problema del país, 11 puntos por encima del promedio poblacional y 24 puntos por encima del segmento de los adultos mayores.
Especial mención merece el desempleo, mencionado por 38% de los jóvenes como principal problema del país, frente a un 14% de los adultos mayores. En el otro extremo, entre los adultos mayores se encuentran los porcentajes más altos alcanzados que señalan a la delincuencia y al coronavirus como principales problemas del país (en este último caso duplicando al porcentaje registrado entre los adultos jóvenes). Más allá de las diferencias en el perfil ideológico de las generaciones, las tendencias son mayormente consistentes con el impacto diferencial de cada problemática según edad.
Es decir, la mirada sobre los problemas del país está inevitablemente afectada por los riesgos personales que comporta la etapa vital por la que se transita. Por ejemplo, mientras la principal población de riesgo del COVID-19 es más proclive a señalarlo como el principal problema del país, el segmento etario más proclive a sufrir el desempleo es aquel más propenso a ubicarlo al tope de los problemas.
La información presentada en este informe proviene de una encuesta de telefonía celular a personas mayores de 18 años residentes en todo el país.
La medición fue realizada entre el 22/2/2021 y el 1/3/2021 sobre la base de un muestreo aleatorio a números rango de telefonía celular. La muestra es de 800 casos y el margen de error máximo para las proporciones referidas al total de la muestra es de +/-3.5% para un nivel de confianza del 95%.