“Brasil: gol en la hora”, así lo define Casas en el Este a la vuelta de tuerca que tuvo el turismo proveniente de ese país. Es que las expectativas —consideradas como positivas —eran que en verano llegarían la misma cantidad de brasileños que la temporada pasada, es decir, un 19% menos respecto al récord del mismo período de tiempo en 2014-2015.
La realidad marcó que hubo una mejora del 18% en comparación con el verano pasado, lo que implicó que se estuviera muy cerca de igualar los números conseguidos hace dos años. Según explican desde Casas en el Este e InfoCasas, la remontada se debió principalmente a la mejora de la competitividad de Uruguay respecto a Brasil sobre fines del 2016.
El período favorito de los brasileños, Reveillón, que va desde el 25 de diciembre al 6 de enero, tuvo un aumento de un 30% de visitantes de esa nacionalidad. Sin embargo, argentinos y uruguayos no se quedaron atrás. Mientras que los primeros vinieron un 142% más —porque por primera vez, Argentina está más caro que Uruguay —, los segundos lo hicieron en un 102% más.
Salvo la primera quincena de febrero, que hubo una caída del 2% en la ocupación respecto al año pasado, porque Carnaval había caído en esos primeros 15 días, el resto de la temporada se mantuvo con niveles muy altos de aumento para las tres principales nacionalidades que vacacionan en Uruguay. La segunda quincena de ese mes mostró el crecimiento más importante, con una llegada de un 135% más de uruguayos, 165% más de argentinos y 80% de brasileños. En total, el aumento de la ocupación fue del 60%.
De acuerdo a Casas en el Este, la lógica suele indicar que si hay una buena temporada de verano, también lo será para la de Turismo. Se espera un incremento del 30% de la ocupación para esa semana.