En el tercer trimestre de 2022 -finalizado el pasado 28 de agosto-, el grupo estadounidense que opera la marca Levi’s registró ingresos de US$ 1.517 millones, lo que supone un crecimiento interanual del 1,3% en su facturación, mientras que en el acumulado del año la cifra de negocio de Levis Strauss se elevó un 12%, alcanzando los US$ 4.580 millones.
Según datos divulgados por la compañía de los clásicos pantalones de jeans, las ventas registraron un avance del 3% en América -facturando hasta US$ 805 millones- y del 36% en Asia -sumando US$ 221 millones-, sin embargo en Europa, donde Levi’s ha sido siempre una marca fuerte, la facturación cayó un 19%, alcanzando los US$ 390 millones.
De este modo, en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, Levis Strauss obtuvo un beneficio neto de US$ 418,5 millones, un 4,5% más que en 2021.
La multinacional comunicó que espera lograr, en el conjunto del ejercicio 2022, un incremento de la cifra de negocio de entre el 6,7% y el 7%, cuando previamente confiaba en un crecimiento del 11% al 13%.
En referencia a la presión macroeconómica en Europa y Estados Unidos y los obstáculos cambiarios a nivel mundial, Chip Bergh, presidente y consejero delegado de Levi Strauss, dijo que “a pesar de un entorno más desafiante, obtuvimos resultados sólidos en el tercer trimestre”, agregando que “nos hemos diferenciado de la competencia al hacer movimientos correctos en tiempos difíciles y este entorno no es diferente”.