Para ello, un profesional independiente, aplicando normas profesionales internacionales, realiza procedimientos sobre la información con el fin de obtener evidencia suficiente y apropiada para expresar una opinión o conclusión sobre si esa información, preparada por un tercero, cumple con criterios preestablecidos.
Se puede aplicar en varios casos y se adapta a los requerimientos de las partes interesadas. Algunos ejemplos son: revisión del cumplimiento de disposiciones contractuales, así como ratios o covenants (tanto financieros como no financieros), validación de información financiera (como ventas, márgenes de utilidad o EBITDA), revisión del cálculo de honorarios variables o de cifras proyectadas, revisiones de seguridad sobre tecnologías de información y revisión de información incluida en reportes de sostenibilidad.
Se trata, por lo tanto, de una alternativa cuando se busca aumentar el nivel de confianza de los usuarios sobre determinada información no apropiada para ser sometida a una auditoría convencional de estados financieros.
Por:
Paola Tettamanti, senior manager de Auditoría de PwC Uruguay.
Enrique Arias, senior manager de Auditoría de PwC Uruguay.
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