La pandemia: Creo que fue un desafío. A todos nos permitió aprender lo que por lo menos queremos aprender de todas las instancias que nos da la vida, en el sentido de que algo que podría en su momento parecer que todo era negativo -que obviamente tuvo muchas cosas negativas-, pero lo positivo fue ver que realmente podíamos estar comunicados mucho más allá de lo que sabíamos que podíamos estar.
Aprendimos a trabajar en equipo a través de las plataformas electrónicas, las distancias se acortaron muchísimo tanto en los equipos locales como en los remotos. Con esto descubrimos que el formar un equipo va mucho más allá que el compartir un espacio, es compartir una visión y eso se puede hacer sin compartir el lugar físico y estando distantes. La conclusión que sale de esto es que el límite está muy lejos del que creíamos que era el establecido.