Los datos coinciden con la coyuntura y con la exhortación hecha a la ciudadanía de reducir su movilidad al máximo que puedan. En un escenario así, es lógico y previsible que las transacciones digitales fueran ganando terreno sobre las físicas. Una vez superado el desconocimiento del uso de algunas herramientas, la seguridad y comodidad que ofrece la tecnología genera que los uruguayos se vuelquen a los canales digitales de movimientos financieros y los hagan crecer.
Esto mismo, dicho en números, se traduce en que, desde que se instaló en el país la emergencia sanitaria, la cantidad de usuarios registrados para operar en línea, fundamentalmente a través de las aplicaciones bancarias para celulares, se incrementó un 26%.
Según datos divulgados en los últimos días por Edgardo Cortaza, gerente general de Banred –la red de cajeros automáticos más importante del país que cuenta con el respaldo de las principales instituciones financieras privadas del Uruguay–, hubo un incremento del 54% del uso de aquellas aplicaciones que tienen los bancos para el pago en línea de servicios y facturas.
En relación a este comportamiento, las transacciones realizadas en los Automated Teller Machine (ATM), conocidos por todos como los cajeros automáticos, descendieron durante la segunda quincena de marzo un 25%, no significando necesariamente una baja en los montos de dinero retirado, ya que en volumen general de movimiento se mantienen. Es decir, se va menos veces al cajero, pero se saca más plata. Este comportamiento también se repite en los cajeros de la RedBrou, según consignó en una entrevista radial Mariela Espino, gerente general del Banco de la República.
Otros datos que se desprenden de los movimientos online y en los ATM es que, el pago directo con débito en los comercios también ha disminuido, creciendo las compras por internet, especialmente en especial algunos rubros, como por ejemplo supermercados y farmacias, en los que se ve algo similar a lo que ocurre en los cajeros: los tickets aumentan sus importes, pero son menos frecuentes.
En suma, con estos datos a la vista, los analistas aseguran que para 2020 las transacciones realizadas a través de los canales digitales superarán el 50% o más, ya que las posibilidades de multipagos que están ofreciendo los bancos con sus apps –pudiéndose pagar todas las facturas de servicios públicos como de privados– marcan el rumbo de una nueva normalidad en el marco de una saludable inclusión financiera que ha permitido a muchísimas personas tener acceso a productos financieros útiles –transacciones, pagos, ahorros, crédito y seguro– que satisfagan sus necesidades.