También les molesta el vapor de los “puchos” electrónicos.
El gobierno ratificó que tampoco quiere saber de nada con los cigarrillos electrónicos y en la sesión del Consejo de Ministros del 2 de setiembre, firmó la partida de defunción del dispositivo, que tanto había alentado a sus importadores. En respuesta al recurso de revocación que interpuso la firma Vanamix, argumentando que los dispositivos que importa “no contienen tabaco y no permite inhalar humo sino vapor, no insta a fumar y no es nocivo para la salud” el gobierno reafirma la prohibición basado en que los cigarrillos electrónicos “funcionan a pila, que en la combustión de cartuchos contienen nicotina que con otros químicos y sustancias se convierten en vapor que es inhalado por el fumador”.