- La falta de actualización en muchos regímenes y escalas mete “dentro del zoológico” cada vez a más contribuyentes.
- Una cadena de pagos cada vez más engranada que complica financieramente a las empresas que tienen que pagar hoy un IVA de unas facturas que recién cobrarán en 60 o 90 días.
El economista Arthur Laffer presentó en el siglo pasado un modelo según el cual el incremento de los impuestos no siempre conlleva un aumento de la recaudación fiscal. Así, si los impuestos son lo suficientemente altos una suba impositiva no llevará necesariamente a una mayor recaudación.
“El aumento de la presión tributaria, amén de generar un problema financiero también está causando problemas de rentabilidad”, subraya Andrés Mir, del Iaraf.
De acuerdo al análisis de este especialista, la inflación está haciendo mella en las estructuras de costos e ingresos de las empresas.
“El régimen de retención de Ganancias, por ejemplo, implica que a los proveedores que se les paga más de $12.000 por mes se les retenga el porcentaje de ese impuesto. El tema es que ese monto no se adecúa desde hace 10 años y gana proporción Ganancias vía retención y anticipo”, explica.
Mir destacó que los países con mayores regímenes de retenciones y percepciones son los que mayor grado de evasión poseen. “Se busca capturar a través de los grandes contribuyentes lo que podrían evadir los más pequeños. El problema es que la presión viene aumentando desde hace 6 o 7 años y podemos tener un problema como el que describió Laffer”, señaló Mir.
Cabe recordar que la teoría de Laffer recibió muchas críticas de destacados economistas, como Paul Samuelson o Milton Friedman, entre otros.