Acá te dejo algunos tips para que le des un poco de vida y renueves estos básicos del estilo clásico, que no deja de ser un estilo muy compañero y elegante además que permite múltiples combinaciones, pero que muchas veces hace que nos veamos uniformadas y con falta de creatividad.
El secretito está en la compra y en sacarte algunas dudas que arremeten con animarte a dar el gran salto, y a comparte algo divertido… por ejemplo:
• Justo cuando estabas por pagar el blazer blanco, desde la vidriera te hace un guiño el fucsia con ribetes amarillos.. Pero te parece que ponerte eso, hace llamar mucho la atención. Hoy los colores dan vida, añaden luz al rostro y crean ambientes más motivados a la acción.
• Pasaste por la vidriera y viste ese foulard espectacular en tonos, limones, azul eléctrico, verde agua y naranjas, pero pensaste que no te combina con los zapatos y carteras que tenés en guardarropas... No importa, ya está demodé el composse, si nada combina mejor.
• ¡Ah! Ese sombrerito bombee en verano. ¡Qué divino le queda a la modelo de la foto! Pero... si me lo pongo yo, se ríe desde el portero hasta mi compañero de oficina... La única que se debe sonreír sos vos, cuando lo lleves puesto.
• El vestido jackie beige ya estaba embalado, cuando sale del probador una señora 10 años más grande que vos con uno azul francia en villela que le queda espléndido... Y pensás: ese color... ¿con qué saquito me lo pongo? Ese color puede ir con campera de jeans blanca por ejemplo y sandalias taco intermedio chinos.
Y así podemos hacer larga lista, de los ataques anti- innovación y anti-estilo personal, que nos pueden sorprender al momento de comprar. Es cuestión de aprender a domarlos un poquito y animarnos a darle un toque personal e innovador a lo clásico y conservador.
Innovando y descontracturando el look clásico...
(by L`etiquette, de Anabella Rao y Pamela Moreta) ¿Sos una mujer acostumbrada a las molderías clásicas, los colores neutros y te atraen muy poco los estampados? No te preocupes que hay unos secretitos que te van a ayudar a que no parezcas aburrida y siempre vestida igual.