“Hay que empezar a entender que hay que tener mayor capacidad intelectual para escribir un poema que para jugar con una computadora, los chicos juegan con las herramientas de su época, eso no demuestra nada”, sintetizó Etcheverry quien añadió: “Se ha perdido la significación social de la educación. El problema de la educación es pre-educativo: las escuelas son vistas como lugares donde se hacen cosas que no son muy importantes”.
Por qué se agiganta la brecha entre estudiantes ricos y pobres en Argentina, según Juan José Llach, “Todos pensamos que hay una crisis en la educación pero que no nos toca a nosotros”, dijo exrector de la UBA para sintetizar el momento que vive el sistema pedagógico en el país.
“La tarea de educación debe volver a ser socialmente prestigiosa”, agregó, luego, Juan José Llach, el disertante que acompañó a Jaim Etcheverry en el panel sobre Educación y Desarrollo Humano.
Según el exministro de Educación del gobierno de la Alianza, una diferencias de 40 puntos en las pruebas equivale a un año de estudio. Así, la diferencia entre estudiantes ricos y pobres equivale a 3 años más de estudio para los de mayor poder adquisitivo. “Ese es el cachetazo de la desigualdad”, graficó.
En tanto, Llach destacó el gran aumento de la matrícula en escuelas técnicas. “Es algo para celebrar, sobre todo en una cultura latinoamericana donde la relación con la ciencia de las tecnologías es muy poca”, expresó y subrayó lo hecho en la política educativa en este sentido durante la última década.
Sin embargo, cuestionó que no se hayan tomado evaluaciones censales entre 2000 y 2010.
Menos mal que tenemos las pruebas internacionales , sino tendríamos el Síndrome de Suecia. “Nos creíamos los mejores del mundo en fútbol entre el año 1938 a 1950 porque no jugamos ningún mundial, fuimos al campeonato de Suecia y los Checos nos golearon 6-1”.