Uno de los competidores creó un producto que por su nombre bien podría ser un éxito en Chile: se trata de los WeOn Glasses.
Los ION Glasses, son de origen franco-español ponen el acento en el diseño. La tecnología está puesta en el armazón, porque la idea de sus creadores es que sea un producto que se pueda usar todo el día. No tienen una pantalla integrada, como Google Glass, sino que tiene un LED en una las patillas del anteojo, que parpadea para notificar la llegada de un mensaje. Con él se puede interactuar con un smartphone o tableta, recibir notificaciones, alertas, ver mensajes de WhatsApp o las llamadas recibidas. También es posible cambiar la canción que se esté escuchando en el smartphone o ajustar el volumen, sacar una foto o empezar a grabar. Estarán habilitados para funcionar tanto con Android como con iOS. Estos lentes cuentan con dos botones, para responder o cancelar las llamadas, activar la cámara, o pasar diapositivas de una presentación. Traen también una función que permite localizarlos desde un dispositivo portátil en donde se encuentren.o antes de sentarse sobre ellos.Además, permiten que los desarrolladores de aplicaciones puedan crear las más diversas aplicaciones para aprovechar estos anteojos, que todavía no están a la venta.
Los Vuzik salieron al mercado antes que los Google Glass. Este dispositivo cubre un solo ojo, pero trae una cámara de 5 megapixeles y puede grabar video en HD. Usa un sistema operativo basado en Android, permite leer emails, traducir textos. Trae acelerómetro y una brújula. Su precio es de US$ 999.
El Atheer One tendrá una cámara dual de 8 megapixeles, pantalla táctil y contará con un procesador ARM. Se podrán cambiar las lentes y se podrá conectar a un smartphone. En estos lentes de realidad aumentada, el menú se maneja en forma virtual, con gestos en el aire. El precio rondaría los US$ 500.
La empresa de las impresoras quiere sumarse a la moda de los anteojos de realidad aumentada con un diseño con doble pantalla 3D y una cámara para capturar video. También incluiría giróscopo, acelerómetro y brújula. Correría una versión de Android y costaría unos US$ 700.
Otro producto que se conectará con los smartphones para emitir alertas directamente al ojo del usuario es GlassUp , que no usa una pantalla sino que proyecta imágenes sobre el cristal de los anteojos. Con un peso de apenas 20 gramos, se conecta vía Bluetooth con el smartphone y es compatible con Android y iOS. La batería ofrece un día de autonomía. Incluye acelerómetro, brújula y un sensor para adaptarse a la luz ambiente. Su precio rondará entre los US$ 299 y US$ 499.
El Innovega Ioptik Está un paso más allá que el resto, porque en este caso se trata dos opciones: unos anteojos relativamente convencionales y una lente de contacto capaz de mostrar imágenes directamente al ojo humano. Ahí mismo, si la compañía cumple con lo que promete, será posible ver películas, jugar videojuegos o ver información en realidad aumentada. Todavía está en experimentación.
El Laforge Optical tiene un diseño que lo hace parecer un par de anteojos comunes y corrientes, a los LaForge pueden añadírsele lentes prescriptas por un oculista. Básicamente, muestra la información que aparece en la pantalla del smartphone, aunque incluye una cámara y un micrófono. En etapa beta, rondarán los US$ 820 para cuando salga al mercado.
El dispositivo de la empresa israelí, llamado Lumus DK 40, trae una pantalla en la lente derecha. Una aplicación de Android permite utilizarlo remotamente. Usa un mini proyector para mostrar imágenes en alta definición delante de los ojos, creando una sensación de estar viendo una imagen más grande en una pantalla transparente. Trae una cámara de 5 megapixeles.