¿Las agencias aplican el Design Thinking o solo lo predican?

Las experiencias que consiguen formar parte de la cultura, suelen ser una intersección entre el storytelling y el diseño. Las historias ayudan a inspirar y conectar a las personas, mientras que el diseño es la herramienta ideal para acceder a nuestra imaginación cuando se está creando una historia impactante y memorable.

Hoy en día, es más importante que nunca poder utilizar el poder del diseño y del storytelling para enriquecer el branding y las comunicaciones. Cada día los consumidores elevan sus expectativas, así que las marcas tienen cada vez más complicado sorprenderlos y generar su atención en un entorno visual totalmente saturado. Y, a la vez, los tiempos y los presupuestos se encogen.

Pero lo cierto es que la mayoría de agencias no están llevando a la práctica el Design Thinking. En un periodo realmente complicado para su superviviencia, no hacen más que señalar palabras como más rápido, más barato, más eficiente, más ágil o más infinito. Pero la tendencia, según 360.advertisingweek.com, es a que equipos más pequeños se ocupen de problemas más complejos. En algunos casos incluso se espera que un solo diseñador saque adelante todo el trabajo.

Pero, ¿cómo está afectando todo esto al producto? ¿Permite todo esto que se produzca un verdadero Design Thinking? Lo cierto es que si se encarga a un solo diseñador de todo el proceso de diseño, el producto será el resultado de un único punto de vista. En un mundo donde cada vez se busca más un Design Thinking global, la diversidad de puntos de vista aporta valor. Si no se tiene un equipo diverso en género, raza, cultura o edad, no se estará reflejando la propia complejidad del mundo.

Contando con un amplio rango de creativos, no solo se podrá pensar más rápido, también se podrán resolver los retos de diseño más deprisa. Si la meta es conseguir un gran diseño, hay que tener siempre en mente la importancia de la diversidad. Incluso aunque una sola persona pueda hacer las cosas más ágiles, rápidas y baratas, tendrá sus limitaciones.

¡Y no para de brillar! (El Dorado llega por primera vez a Salto y a lo grande)

Con más de 95 años de trayectoria en el país, El Dorado cuenta actualmente con 76 locales y proyecta cerrar 2025 alcanzando las 85 tiendas. El primer paso en este camino será en julio, cuando la firma pionera en el supermercadismo del interior del país abra por primera vez una sucursal en el departamento de Salto. Según dijo José Manuel Polakof a InfoNegocios, “para esta apertura llevamos invertidos unos 5 millones de dólares y va a ser unos de los locales más grandes de la empresa”.