El martes pasado en InfoNegocios contamos que ya se habían anunciado las disposiciones para que las compañías de cruceros que operan recorridos en el Cono Sur -entre Argentina, Brasil y Uruguay- realicen sus clásicas rutas, en las que varios puertos de estos países, entre los que están el de Montevideo y Punta del Este, pueden llegar a recibir hasta 250.000 turistas.
El punto es que ahora, los cruceros MSC Sinfonia, MSC Orchestra, MSC Preziosa y MSC Splendida, todos pertenecientes obviamente a la compañía naviera MSC y que tenían previsto realizar su temporada 2021-2022 desde y hacia los puertos de Buenos Aires y Montevideo, no echarán anclas en ninguno de los dos países. ¿Por qué? Por un “bloqueo” brasileño.
Según una disposición que tomó Brasil en estos últimos días, los barcos con pasajeros que naveguen por aguas brasileñas solo podrán hacer cabotaje, por lo tanto, cualquier itinerario que quede por fuera de esa jurisdicción -el de las aguas de Brasil- no tiene posibilidad en el recorrido. Es decir, para MSC o cualquier otra compañía resulta económicamente inviable que cruceros que vienen navegando desde Norteamérica o el Caribe lleguen a Sudamérica.
La naviera, que por esta razón decidió suspender la temporada 2021-2022 en los puertos de Argentina y Uruguay, valoró el apoyo de las autoridades de ambos países ante una serie de solicitudes que la compañía efectuó con el fin de establecer protocolos conjuntos de operación en el contexto de la nueva normalidad que todavía se da en medio de la pandemia por el COVID-19.
“Con mucha tristeza hemos tenido que tomar la decisión de cancelar la temporada de cruceros desde los puertos de Buenos Aires y Montevideo”, dijo Javier Massignani, managing director de MSC Cruceros en Argentina, agregando que “las razones expresadas nos exceden como compañía y nos impiden poder llevar adelante la presente temporada”.
“Siempre fue nuestro objetivo velar por un reinicio gradual y seguro de las operaciones en los puertos de Buenos Aires y Montevideo -sostuvo Massignani-, garantizando la logística y los procedimientos necesarios basándonos en nuestro protocolo integral de salud y seguridad, que ya ha demostrado su efectividad tanto en Europa como en el Caribe donde reiniciamos las operaciones con el apoyo del mismo”.
Este palo en la rueda que pone Brasil -aunque mejor sería decir esta rotura de remo- llega apenas unos pocos días después de que el Ministerio de Turismo difundiera los protocolos para el arribo de cruceros a nuestro país, una actividad turística que genera importantes ingresos, como sucedió en la temporada anterior, que si bien fue atípica porque se vio interrumpida el 13 de marzo de 2020 por la declaración de emergencia sanitaria, significó la llegada a Uruguay de 252.320 personas (71% en Montevideo y 29% en Punta del Este), cuyo gasto total en el país fue de US$ 10 millones (desembolsados el 79% en Montevideo y el 21% en Punta del Este).