Hacia mediados de 2020 tres jóvenes enólogos, Bruno Bresesti, Nicolás Monforte y Santiago Degásperi, se plantearon el desafío de elaborar distintos tipos de vino naturales, una tendencia que venía cobrando mucha fuerza en el mundo pero que en Uruguay no se conocía. Así surgieron Suelto, Simple, Nakcool y Anfor, todos elaborados con una mínima intervención y bajo el Proyecto Nakkal, que ahora pasó a llamarse Nakkal Wines.
“Pasamos de elaborar 3.000 botellas en 2020 a ahora estar produciendo, de las cuatro líneas de vinos, que son 10 etiquetas, unas 30.000 botellas. Es decir, crecimos enormemente y eso nos ha demandado mucho trabajo”, dijo Santiago Degásperi a InfoNegocios, agregando que “pasamos de Proyecto Nakkal a Nakkal Wines por el simple hecho de que Bruno ahora no nos acompaña, ya que está a full con su bodega familiar”.
La lógica de mantener Nakkal como marca tiene sus razones: Suelto, Simple, Nakcool y Anfor han conquistado el mercado internacional. Tanto es así que, según el enólogo, “en Uruguay colocamos no más del 5% de nuestra producción, nuestros vinos son más bien apreciados en el exterior, donde la producción y consumo de vinos naturales es más común”.
Sin duda la mínima intervención hace que estos vinos sean productos con mucha personalidad, muy auténticos, muy exclusivos. De hecho, Nakkal Wines está presente –dijo Degásperi a InfoNegocios– en la carta de vino del exclusivo restaurante de Lima, Central, considerado el mejor del mundo por la publicación The World’s 50 Best Restaurants.
“Además de Uruguay, estamos presentes en Estados Unidos, Inglaterra, Polonia, México y Brasil, más otros tres países que ingresamos recientemente, que son Perú, Suecia y Japón”, dijo Degásperi.
Estas buenas noticias para Degásperi y Monforte significan redoblar la apuesta, por eso presentaron además del muevo nombre del proyecto, nueva añada de vinos, nuevas etiquetas e innovaciones como a la que ellos se animan: un vino de miel –en vez de uva– y un vino hecho con el artista urbano Untonga, quien mediante epitafios rosados escritos a modo de legado propone naturalizar el concepto de muerte.
“En un vino de corte, con Merlot, del que hemos elaborado 1.000 botellas, de las cuales 500 van a México”, sostuvo Degásperi.
En suma, inquietos y en constante búsqueda de innovar en el mundo de la vitivinicultura, los enólogos de Nakkal Wines no terminan de lanzar un nuevo producto que ya están pensando en otro, algo que pronto conoceremos y que seguramente abrirá otra nueva puerta de un mercado internacional.