En 1999 Verónica González Carli se hizo de la corona de Miss Uruguay, lo que la llevó a representar al país en muchísimos eventos y oportunidades y así se hizo de infinidad de amigos extranjeros, quienes luego, al visitarla en nuestro país, encontraban en ella una anfitriona apasionada por el mundo de los vinos y las historias que hay detrás de cada una de las bodegas uruguayas.
Si bien en aquel entonces -e incluso durante mucho tiempo después- el enoturismo en Uruguay no era una actividad que tuviera mucho desarrollo, González Carli era lo que estaba haciendo cada vez que una bodega le abría sus puertas para recibirla, a veces con 10 personas, otras con 20, después con 30 personas y así cada vez más.
“Es increíble lo que pasó, porque primero fueron amigos, después un conocido que ya había participado, después un conocido de ese conocido y así. Siempre eran extranjeros. Me llamaban y me preguntaban qué bodega iba a visitar el próximo fin de semana”, recordó González Carli a InfoNegocios, agregando que “después fueron sumándose extranjeros residentes y luego público local. Ahí es cuando me dije algo tengo que hacer con esto”.
Durante más de 15 años González Carli trabajó en una agencia de publicidad y a eso se dedicaba todos los días, por lo que las visitas a las bodegas era algo que hacía los fines de semana como un hobby.
“Hasta que las visitas fueron siendo, de modo implícito ya, como una obligación, una vez al mes”, remarcó la emprendedora, señalando que fue en ese momento que decidió “apostar todo por esta pasión y a comienzos de 2015 surgió Wine Explorers Uruguay”.
Más adelante, hacia fines de 2016, un profesor de Ciencias nacido en Alaska y que impartía clases en el Uruguayan American School, Tavis Davidson, pasó de ser un fiel participante de las recorridas a un colaborador invaluable para Wine Explorers Uruguay.
“En estos siete años -dijo González Carli a InfoNegocios- llevamos realizados más de 150 eventos en más de 50 bodegas diferentes de todo el país, con una concurrencia de cerca de 4.000 personas amantes del vino, pero no solo, sino también de experiencias distintas”.
Y como Wine Explorers Uruguay se trata de vivir experiencias -que vale señalar son propuestas que van desde $ 4.000 en adelante-, González Carli y Davidson también buscaron una distinta para ellos, creando su propio vino: We, un blend de Tannat, Merlot y Petit Verdot con barrica, producido por la bodega Bracco Bosca, de edición limitada.
“We se lanzó en setiembre del año pasado como modo para reinventarnos, porque la pandemia nos dejó en un momento sin poder visitar bodegas y menos que fuera en grupos”, remarcó la emprendedora, agregando que durante ese tiempo Wine Explorers Uruguay ofrecía mensualmente packs de vinos recomendados, algo que ahora que los wine tours retomaron su regularidad continúa existiendo.
Innovación permanente
Si hay algo que define a Wine Explorers Uruguay -o a sus creadores- es la innovación permanente, estar un paso adelante, crear, invitar a algo nuevo. En este sentido, la firma llevará adelante -a partir de la semana que viene- las primeras clases de cata en inglés del país.
“Sabemos que clases de cata hay y muchas, pero este ciclo no tiene precedentes en nuestro país porque se trata de cuatro master classes de cata enteramente en inglés, dictadas por Líber Pisciottano, elegido como el mejor sommelier de Uruguay en 2021”, sostuvo González Carli.
Si bien es un ciclo de cuatro encuentros consecutivos, según la emprendedora, cada uno es independiente y puede participarse de todos o solo de algunos, existiendo como cierre un quinto encuentro en el que se realizará una cata a ciegas para ver todo lo aprendido.
“El ciclo comienza el 4 de mayo y finaliza el 25 del mismo mes, siendo la cena de cierre el miércoles 1º de junio”, puntualizó González Carli, remarcando que el programa trata de “la vinificación de blancos, rosados, tintos y espumosos, así como de la influencia de la barrica y el envejecimiento en los vinos”.
Según la creadora de Wine Explorers Uruguay también habrá espacio para “los vinos del viejo mundo, con la cata de vinos de Francia, España e Italia, así como los vinos del nuevo mundo, donde el paladar degustará vinos locales y de Argentina, Chile y Nueva Zelanda”.
Como se dijo antes, cada encuentro de esta primera master classes de cata en inglés del país es individual, por lo que su costo es variable, rondando desde los $ 2.200 a $ 2.800, mientras que la cata a ciegas y cena de cierre saldrá $ 3.500.