Hacia comienzos de 2020, muy lejos de avizorar un sacudón económico y sanitario que, si bien estaba instalado en el mundo, parecía muy lejos de Uruguay, la familia propietaria de esta casa ubicada en pleno centro y corazón de Carrasco, más precisamente en Schroeder 6558, decidió hacer un proyecto no innovador pero sí inusual en el mercado: crear oficinas de alquiler privadas.
“Posiblemente lo más provocador de este proyecto pasa, en nuestro caso, por el valor afectivo de la casa, pero eso sin duda es el plus que tiene el lugar, que está todo adecuado para tener oficinas privadas, pero no deja de ser un lugar con la calidez de un hogar”, señaló Leonardo Alonso, miembro de la familia que creó este espacio denominado ahora Schroeder Haus.
Concretamente se trata de una casa con 12 oficinas totalmente privadas, con distintos espacios, como por ejemplo la más grande, de 27 m2 (con baño en suite, terraza y ventanal al frente), cuyo alquiler es de US$ 1.100, o bien las más pequeñas, entre 7 y 10 m2, con alquileres por US$ 500. El interior de Schroeder Haus y de sus oficina es muy atractivo y delicadamente cuidado, gracias al trabajo de la diseñadora de interiores María Jesús Arocena.
“Desde la inauguración o apertura el pasado lunes, ya contamos con un 27% de ocupación, siendo empresas de tecnología, inmobiliaria y de marketing online las primeras que ocuparon sus espacios”, remarcó Alonso, agregando que algunas personas que ya consultaron volvieron a llamar para agendar una reserva.
“Evidentemente el hecho de tener tu oficina privada, sin tener que compartir espacio de trabajo con nadie, porque no se trata de un cowork, hace de Schroeder Haus un lugar de interés para muchas empresas o profesionales, que saben que tienen su propia llave para entrar y salir”, remarcó Alonso, agregando que en tiempos de home office, nada como un verdadero hogar para trabajar con calma, sin las distracciones que pueden ocasionar niños o tener que compartir recursos tecnológicos con otros integrantes de la familia.
“Una de las principales ventajas de Schroeder Haus, más allá de su concepto de oficina privada, es que desde el aspecto económico es mucho más viable que otros alquileres de oficinas en Carrasco, que pueden rondar los US$ 1.500 o US$ 2.000. Aquí, además, en el alquiler está incluido el mantenimiento de áreas verdes y alarma, los espacios comunes, el Wi-Fi, la limpieza e incluso todos los impuestos de servicios”, puntualizó Alonso.