En el mundo de las redes y del e-commerce, el nombre de Mónica Sniadower es, desde hace más de cinco años, sumamente conocido para todos los fanáticos del chocolate, ya que desde ese universo online, y más específicamente a través de su emprendimiento Quiero Chocolate Uruguay, la chocolatier ha venido endulzando de sabores, aromas y texturas el paladar de los uruguayos.
El punto es que ahora, mientras la mayoría de las empresas se pasan del mostrador a la venta online, Quiero Chocolate Uruguay hace el movimiento inverso, incorporando a la venta 100% digital la venta directa, la venta mano a mano, cara a cara, bombón a bombón.
“La gente lo estaba pidiendo”, sonrió Sniadower, agregando que “la decisión de abrir un local propio implica no solo invertir recursos, sino también más tiempo de trabajo y una mayor producción de chocolates, que en definitiva es la parte concreta de este paso, pero lo importante acá es seguir apostando por una pasión que descubrí hace años y que me ha permitido crecer”.
En el local, que próximamente abrirá sus puertas en el corazón de Pocitos -más precisamente en Gestido y Brito del Pino-, Sniadower ofrecerá sus bombones, que son como pequeñas obras de arte, pero sobre todo aprovechará la zafra de Pascua para mostrar sus creaciones en huevos, apostando a lo clásico de la época -pero con su toque personal- y volviendo a presentar sus “medios huevos de pascua” que, desde 2020, la chocolatier viene vendiendo muy bien.
“Desde hace un par de años, el medio huevo de Pascua es un boom en nuestro país -sostuvo Sniadower-, pero no es algo nuevo o que haya inventado yo. En Brasil, por ejemplo, el medio huevo es un clásico”.
En esta presentación, por ejemplo, una de las mayores tentaciones es el medio huevo de chocolate semi amargo con capas de marroc y almendras tostadas, que incluye una cuchara de chocolate. ¡Irresistible! Se trata de 530 gramos y 13 centímetros de puro sabor a $ 1.300.
“La idea del local, también, tiene que ver con que a las personas les gusta ver este tipo de productos, tenerlos en sus manos, percibir su aroma e imaginar su sabor”, dijo Sniadower a InfoNegocios, agregando que “si bien todavía estamos en plena zafra, en ventas esta Pascua muestra un crecimiento del 35% respecto del año pasado”.
Más allá de la venta directa de bombones, mendiants, tabletas, barras y otras delicatesen, un punto fuerte que tiene Quiero Chocolate Uruguay es el trabajo corporativo, con diseños personalizados y exclusivos para las empresas.
“En este sentido las ventas a empresas crecieron un 200%”, dijo Sniadower a InfoNegocios, remarcando que todo el emprendimiento viene “creciendo sostenidamente y solo en términos de producción ya alcanzamos a emplear un 50% más en kilos de chocolate”.
Dicho de otro modo, la Pascua de 2023 viene mucho mejor que la de los últimos años sostuvo la chocolatier, señalando que están vendiéndose más cantidad de huevos tradicionales, que en el caso de Quiero Chocolate Uruguay lo tradicional es su formato, porque se tratan de elaboraciones únicas, como por ejemplo los pintados artesanalmente -de 550 gramos y 17 centímetros a $ 1.450- o lo que según Sniadower más están pidiendo ahora, que es una novedad: “una latita con chocolates artesanales, que incluye un delicioso alfajor, formitas temáticas de pascuas, un bocadito de puro dulce de leche elaborado artesanalmente y una selección de nuestros mejores bombones”.
Sniadower, a quien siempre le gustó la buena cocina, en particular la repostería -con especial atracción por el arte, el diseño y la decoración-, remarcó a InfoNegocios que “la apertura de un local con vidriera y mostrador es todo un desafío después de tanto trabajo online, pero me animo a hacerlo porque sé que el paladar de los uruguayos se anima cada vez a probar nuevas cosas nuevas”.
En este sentido, tratándose de chocolate, uno se animaría a decir que no hay tal desafío… ¿Quién va a resistirse a una vidriera con chocolates que parecen joyas?