Envejecer dignamente tiene su precio (casas de salud de lujo cuestan $ 45.000 mínimos al mes)
Juliana: “Creo que está muy bien que ésos lugares existan para quien los puede pagar. Lo penoso es que las personas, que no tienen medios suficientes, tengan que alojarse en lugares cuya calidad deja mucho que desear, y donde las personas, más que tales, parecen objetos depositados en un archivo. Es muy triste eso. Creo que nadie tiene idea de la cantidad de lugares ilegales que hay funcionando a lo largo y ancho del país...” (seguí, hacé clic en el título)