Detrás de esta apuesta está Nobilis, compañía especializada en gestión de patrimonios, que estructurará la emisión de estos certificados. El proyecto ofrece la oportunidad de invertir en tierras y en forestación con un retorno estimado anual de 9,04%. En tanto, la gestión de los activos quedará en manos de un equipo experto: Nobilis, que ha participado en la estructuración de seis emisiones bursátiles por más de US$ 300 millones en los últimos cinco años y Plantesia, empresa que ha gestionado diversos patrimonios con inversiones totales que superan los US$ 700 millones y las 150.000 hectáreas ubicadas en la región sureste y noreste del país, con plantaciones de eucaliptus y pino con destino a la celulosa y madera de calidad.
El proyecto se extenderá por 25 años, con una prórroga de tres, y tiene previstas distribuciones anuales en función de los flujos de fondos disponibles. Según aseguró María José Zerbino, responsable de mercado de capitales de Nobilis, una fortaleza muy importante del plan es que ya cuenta con plantaciones prontas para cosechar.
“Generalmente en este tipo de proyectos se compra la tierra, se plantan los árboles y hay que esperar diez años para recibir el primer flujo luego de la cosecha. En este caso, se adquiere un conjunto de bosques de distinta antigüedad y eso significa que se puede vender madera durante todos los años en los que se desarrolle el proyecto, por lo que esa venta redunda en flujos para los inversores”, aseguró Zerbino.
Refugio natural, retorno de activos e impacto ambiental: las claves del éxito
¿Qué llama la atención de los principales inversores de alto patrimonio para apostar por los activos forestales? Hay por lo menos tres razones que configuran una fórmula exitosa. En primer lugar, la tierra ofrece un refugio natural ante episodios inflacionarios como el que está viviendo la economía mundial. En segundo lugar, los retornos de estos activos tienen muy baja correlación con los activos financieros y eso genera impactos positivos en los portafolios de inversión. Y en tercer lugar, tienen un impacto positivo a nivel ambiental para reducir las emisiones de carbono, asegura Nobilis.
¿Cómo se verá esta fórmula implementada en este caso? Según detallan los expertos en gestión de patrimonios, el título “cotizará en el mercado local y tendrá un mercado secundario donde los inversores podrán comprar y vender antes de su vencimiento. Esto lo vuelve atractivo para inversores con distintos horizontes temporales, que pueden desprenderse del activo antes de la fecha de finalización del fideicomiso”.
Además, por lo que refiere al impacto positivo medioambiental, el bosque está situado en el sureste del país, en los departamentos de Canelones, Maldonado y Lavalleja. Se enmarca bajo la normativa nacional vigente y los estándares internacionales del Manejo Forestal Sostenible (MFS), ya que cuenta desde hace varios años con la certificación internacional voluntaria Forest Stewarship Council (FSC). Fue establecido y aprobado por la Dirección General Forestal y la Dirección Nacional de Calidad y Evaluación Ambiental del Ministerio de Ambiente.
Invertir y recibir: números y proyección
El volumen proyectado de venta en el primer año llegará al entorno de 200.000 metros cúbicos sólidos, y los ingresos totales por la comercialización de la madera para el año 2048 serán de US$ 49,1 millones, apunta Nobilis.
“La demanda de chips por parte de China y Europa aumentó este último año un 30% y la industria local incrementará su producción en 2,1 millones de toneladas por año cuando comience a operar la segunda planta de UPM”, comentó la ingeniera agrónoma forestal Lucía Basso, CEO de Plantesia Forest Asset Management.
El proyecto tiene exoneraciones tributarias de Impuesto a las Rentas de las Actividades Económicas (IRAE), Impuesto al Patrimonio y Contribución Rural.
Todos los detalles de esta oportunidad se encuentran en www.nobilis.com.uy.