Es la combinación de las evaluaciones continuas de riesgos y controles, apoyada en el uso de tecnología y diseñada para reportar en un plazo mucho menor de tiempo que el enfoque tradicional.
La auditoría continua aporta una herramienta que permite ampliar el alcance de la revisión al universo de casos y al estar apalancada en tecnología es posible automatizar su ejecución con mayor frecuencia, identificando así excepciones en forma más oportuna.
Este esquema aporta varios beneficios:
• Mayor cobertura de los riesgos y controles monitoreados
• Mayor agilidad para identificar excepciones y tomar acciones para mitigar los riesgos
• Dedicar mayor tiempo al análisis de riesgos clave
• Aportar un mejor entendimiento de los procesos bajo revisión
• Ayudar a la atracción de talentos que buscan hacer “cosas nuevas”, dedicando más tiempo al análisis y no a realizar tareas repetitivas de revisión / confirmación.
El desarrollo de un programa estructurado de auditoría continua, permitirá eficientizar el uso de las tecnologías disponibles en la organización e incorporar nuevas para apalancar los esfuerzos, profesionalizar los recursos y generar una mejor conciencia del control de las actividades en la primera línea de defensa.
El desafío es ser persistente en un programa que incluya distintas dimensiones: procesos, personas, tecnología; y que establezca acciones a implementar en un esquema de objetivos.
Por:
María Virginia Cuadro, Gerente de Auditoría de PwC Uruguay