La categoría Empresario del Año, el galardón más esperado cada año por todos quienes a diario hacemos InfoNegocios, tuvo en la 19ª edición de la Gala de InfoNegocios un premio de plata más que destacado, dado que Elizabeth Misa, directora del Frigorífico Las Moras, obtuvo el 28% de los votos, apenas un punto por debajo del oro y ocho por encima del de bronce.
Para conocer más a esta Empresaria del Año, dialogamos con ella del premio y de varios temas más del empresariado del país.
¿Cuál es a su entender la clave del éxito empresarial en Uruguay?
La clave es la resiliencia, palabra nueva pero muy aplicable. Las empresas nacionales aprendemos a los golpes y con la concepción que hay que levantarse del piso las veces que sean necesarias, porque nadie va a venir a regalarte nada. Todo va a salir de la capacidad que cada empresa tenga para reconstruirse e intentar avanzar, de salir a golpear puerta por puerta si es necesario. Pero hay que ser consecuente e insistente.
¿Qué cosas hace su empresa para tener el lugar que tiene en el mercado y que lo diferencia frente a la competencia?
No hay una sola cosa sino un conjunto de varias que hace que el cliente te elija por sobre otro. En este mundo cada vez más tecnológico, el trato directo y dedicado hace la diferencia. Obviamente, sin un buen producto sería más difícil poder crecer. En nuestro caso, la carne es un commodity, pero sin embargo nosotros estamos trabajando con los productores en sostenibilidad y así contrarrestar el calentamiento global, contribuyendo a devolver a la tierra algo de lo que, con tanta generosidad, nos brinda. Así buscamos agregarle un valor desde otro lugar. Cuando uno trabaja con pasión, eso se contagia y los clientes también quieren ser parte de eso, quieren sentir lo mismo que uno le transmite.
Si tuviera que definir el 2026 en una sola palabra para su empresa y sus objetivos, ¿cuál sería?
Conquista.
¿Cómo maneja el día a día el hecho de ser mujer en una industria históricamente asociada al hombre?
Nunca me cuestione si por mi género podía o no hacer algo. En mi caso, nací dentro del mundo de la carne, eso creo que me fue preparando para llegar acá. Siempre tuve gente mucho más grande que yo a mi cargo y siempre me respetaron y atendieron mis pedidos, sin pensar si era joven o si era mujer. Hoy estoy acá por los hombres que me ayudaron hace 11 años, que me respaldaron, que me enseñaron los vaivenes de esta industria apasionante y que todos los días vienen a dar lo mejor de ellos por Las Moras. Creo que eso también va en uno mismo, si vas con miedo o si la primera que tiene el preconcepto es una, qué podemos esperar de los demás. Tengo muchas anécdotas, sobre todo del principio, pero hoy soy parte del escenario. Creo que tanto hombres como mujeres tenemos para aportar desde distintas ópticas y en cada una hay una oportunidad de crecer. No es enfrentándonos que ganamos, la riqueza está en que ambos interactúen. Me gusta siempre pensar que para tener un hijo hace falta un cromosoma Y y uno X. La naturaleza es sabia y te da el mensaje más que claro: para lo más lindo que te puede pasar es necesario tener a los dos. No hay más que agregar.
¿Este premio de plata es, según su visión, el reconocimiento a qué?
Primero me gustaría decir que, en mi caso, no trabajo para obtener un reconocimiento, lo hago porque me gusta y es mi forma de vivir mi vida. Más allá de esto, fue lindo que entre todos los empresarios del país te nominen, es una forma de destacarte, de decirte que te están viendo, que lo que hacés en tu empresa se nota desde afuera y eso es importante para el crecimiento de Las Moras, que es una empresa familiar. Luego de tantos desafíos cuesta arriba que tenemos hoy los empresarios, el premio es una caricia que te premia el trabajo, las ganas, la energía, el dar todos los días mucho más de tu 100%. Pero esto no se logra si atrás mío o a mi lado no hubiera gente que desde el primer momento me enseñó y me llevó de la mano hasta acá. Lo mismo mi familia, si no me acompañara y me permitiera volar con estas alas, no podría.
¿Qué le diría al presidente si lo tuviera frente a frente en una reunión?
Le diría que no se olvide de las empresas nacionales. Está bien traer inversiones desde afuera, pero nosotros somos los que vivimos acá, somos los que nos acostamos y nos levantamos con la camiseta celeste puesta, somos los que invertimos acá para nuestra gente y llevamos lo mejor del Uruguay al mundo. Solo eso, que no se olvide.