Miriam Reyes, Qué delgada eres
Qué delgada eres
-me dijo-
y entonces yo pensé en la mujer de la foto
en sus senos grandes
y en los míos pequeños
del tamaño del cuenco que hace un hombre con su mano
del tamaño del cuenco que él hacía con su mano
cuando me dijo: qué delgada eres.
(Cuando un hombre tiembla al tocarte
no te olvidas de él.
Nunca, aunque no llegues a amarle) (…).
El blog de Emma Gunst.