El Ejecutivo y la compañía HIF formalizaron un memorando de entendimiento que habilita el desarrollo de una planta de combustibles sintéticos en el departamento de Paysandú, uno de los proyectos energéticos más ambiciosos anunciados en Uruguay en los últimos años por volumen de inversión y escala productiva.
El acuerdo fue firmado en Torre Ejecutiva por el secretario de Presidencia, Alejandro Sánchez, junto a representantes de HIF, y establece el marco para la construcción y operación de un complejo industrial orientado a la producción de e-combustibles a partir de energías renovables, hidrógeno verde y dióxido de carbono (CO₂).
El proyecto contempla la instalación de una planta de hidrógeno verde mediante electrólisis, sistemas de captura de CO₂ provenientes de fuentes industriales y biomasa, una planta de e-metanol y otra destinada a la producción de e-gasolina y e-gas licuado. A esto se sumarán parques de generación de energía renovable y la infraestructura necesaria para sostener el funcionamiento del complejo.
En su fase final, la iniciativa prevé una capacidad de producción cercana a las 880.000 toneladas anuales de e-combustibles. La logística del proyecto incluye el transporte ferroviario de la producción hasta el puerto de Montevideo, desde donde se destinará mayoritariamente a los mercados de Europa y Asia.
Según lo establecido en el memorando, a partir de 2029 el primer módulo del proyecto permitiría exportaciones por un valor promedio anual de US$ 253 millones, cifra que podría superar los US$ 1.000 millones anuales una vez que los cuatro módulos estén operativos.
La inversión total estimada asciende a unos US$ 5.385 millones y tendrá un impacto relevante en el empleo. Durante la etapa de construcción se prevé la contratación de aproximadamente 1.400 trabajadores, mientras que en la fase operativa el proyecto demandará unos 300 empleos permanentes.
El acuerdo también define un esquema de seguimiento institucional. Se conformará un comité de alto nivel integrado por la Secretaría de la Presidencia y los ministerios de Economía y Finanzas; Industria, Energía y Minería; Ambiente; Transporte; y Obras Públicas, junto a representantes de HIF. En paralelo, funcionará un comité técnico encargado de monitorear de forma continua el avance y cumplimiento de las distintas etapas del proyecto.
Con esta iniciativa, Uruguay busca consolidar su posicionamiento como plataforma regional para el desarrollo del hidrógeno verde y los combustibles sintéticos, reforzando su perfil exportador en energías limpias de nueva generación.