La vivienda Márquez Castro, vivienda unifamiliar, construida en 1926 por el Arq.Fernando Capurro. Encargada por la familia Real de Azúa, la vivienda se vincula estilísticamente a la alternativa hispánica fundamentada en las teorías del arquitecto Christophersen y destinada a la formulación de una arquitectura americana. Esto se revela en la sutil descomposición volumétrica, la ciudad resolución del vínculo entre espacios interiores y exteriores por ejemplo, a través de la Loggia frontal y la importancia otorgada al área de relación, a la que se accede por una gran puerta del año 1780, proveniente de una casa que perteneciera a Juan Antonio Lavalleja.
En ese aspecto, Balcony adquirió y restauró la casa que tiene un valor patrimonial, donde no solo ofrecerá productos mobiliarios, sino que también convirtió a la sede en un espacio multicultural, donde se desarrollarán distintas actividades culturales, como exposiciones, charlas, entre otras.
La nueva sede, ubicada en la calle Potosí 1666, es conocida en el barrio como “la casa de los gatos” por una de sus antiguas propietarias. Cuenta con amplios espacios exteriores que se integran con la propuesta que buscaba Balcony.
La marca inició hace 11 años con artículos de maceta, pero rápidamente se diversificaron e incorporaron nuevos productos como muebles, telas náuticas; y de tapicería, alfombras para exteriores. “Este crecimiento responde no solo a la demanda del mercado, sino también al deseo de nosotras, las fundadoras, que somos yo y mi hermana Priscila Vejo, de crear un espacio integral que fuera más allá de la comercialización de productos en Carrasco”, indicó Stefanie Vejo, una de las directoras de Balcony.
“Siempre soñamos con tener un espacio propio y esta casa, con su gran patio colonial y su arquitectura única, calzaba perfecto para lo que buscábamos”, aseguró Estefanía. Además de la parte comercial, la casa cuenta con un jardín de grandes dimensiones y con un sector destinado a la exposición artística, que permite que la tienda funcione también como una galería.
Agregó que la nueva sede apunta a consolidarse como un punto de encuentro cultural en Carrasco.“Queremos que aquí sucedan cosas más allá del comercio. Buscamos que sea un espacio multicultural donde se puedan realizar charlas, exposiciones y eventos de moda, aprovechando la puesta en escena de nuestro mobiliario de exterior”, explicó la directora.
Por último, resaltó que este espacio cuenta con el respaldo del Banco Santander, quien apoyó la iniciativa de crear este centro que aporte al desarrollo cultural de la zona”.