BMW Motorrad quiere reflotar la Cámara de Importadores de Motos (Mientras, cierra el año con 70 unidades vendidas)

(Por Mathías Buela) La legislación actual no permite acceder a licencias para motos de gran cilindrada sin contar con tres años de experiencia manejando motocicletas de hasta 200 cc, lo que afecta directamente el crecimiento del segmento y el acceso a mejores prestaciones de seguridad. 

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En 2023, BMW Motorrad alcanzó un hito histórico al cumplir 100 años de existencia. Desde su fundación en 1923, la marca ha mantenido una reputación de calidad, innovación y rendimiento en el mundo de las motocicletas. En Uruguay, esta celebración es motivo de orgullo para los aficionados a las dos ruedas y para todos aquellos que han confiado en la marca a lo largo de los años. Con este marco fue que Magna Motors, el representante de BMW Motorrad en nuestro país, organizó para el mes de agosto una celebración especial: llevó a 10 clientes a disfrutar del Motorrad Days de Berlín, en una aventura por los Alpes, recorriendo Alemania desde Munich y el Museo de BMW hasta el Messe de Berlín (donde se llevó a cabo el Motorrad Days), pasando por Austria, Italia, Lichtenstain y Suiza. 

Ahora, casi cerrando el año, conversamos con Federico Bangerter, Gerente General de Magna, quien adelantó que están trabajando para reflotar la extinta Cámara de Importadores de Motos (Cadimo) ¿Por qué? Para entenderlo, nos explicó algunas particularidades del mercado local de motocicletas. 

“El mercado de las motos en Uruguay está, lamentablemente, un poco dejado de lado en cuanto a reglamentación, y tiene un nivel de normas que lo hace, hasta cierto punto, prohibitivo: si uno quien tener una motocicleta de más de 200 cc tiene que haber tenido primero una de 200 cc durante tres años, lo cual es limitante, porque nadie utiliza motos de baja cilindrada para viajar 1000 kilómetros por placer”, dijo. 

A su vez, apuntó que las motocicletas de baja cilindrada no cuentan con los mismos implementos de seguridad presentes en el segmento de motores más grandes. En esa línea, dijo: “En la mayoría de los países del mundo tenés la opción de tener motos con todos los elementos de seguridad desde la primera moto que compras. En España la limitante te da para tener una moto de hasta 300 cc, con control de estabilidad y otros elementos que permiten viajar largas distancias. En ese caso podés empezar con una moto chica pero que te permite viajar, y después saltar a otra más grande. Acá no tenes esa chance, la gente se ve muy inhibida de pegar el salto y no hacen viajes largos, o los hacen pero sin licencia, algo que no queremos que ocurra”. 

La pregunta natural es ¿Cómo trabajan en ese escenario? “Trabajamos mucho en el desarrollo de los clientes. Este año trajimos un instructor certificado cinco o seis veces para darle a los clientes un nivel de instrucción básico y que sigan evolucionando en su conocimiento y cultura”, explica Bangerter. 

Cabe destacar que el core del negocio de BMW Motorrad en Uruguay está principalmente en las motos On Off Road con sus modelos GS, que permiten viajar con el mismo nivel de comodidad en distintos tipos de terreno. A nivel general y por los motivos esgrimidos antes, el segmento de motocicletas de alta cilindrada a nivel local es muy estable, con cerca de 400 motocicletas vendidas por año. El conjunto de compradores es pequeño porque está limitado a quienes se animan a hacer todo el ciclo que comienza en 200 cc, algo que no va de la mano con la necesidad real del mercado.

Es por esto que Magna Motors, en conjunto con representantes e importadores de otras marcas, trabaja en el proyecto Cadimo. “Hace poco empezamos a trabajar para reflotar la asociación de motos. Todos los participantes estamos trabajando en conjunto para hacer un planteo formal y corregir esto; es un trabajo para el mediano plazo. Todos los socios son muy positivos en que esta vez la asociación va a generar un valor como el que logra la de autos a través de ACAU. Tenemos que tomar a ACAU como un ejemplo de algo que se ha hecho bien y hacer lo mismo para que las cosas estén mejor”. 

Cerrando el año, Federico cuenta que están llegando a las 70 unidades vendidas de una gama de productos muy amplia, que va desde los US$ 19.900 por una moto de 750 cc, a más de US$ 30.000. Además, apunta que si bien el nivel de ventas bajó en comparación al 2022, esperan con ansias un lanzamiento muy especial: “Los vehículos más vendidos son los GS, y el pilar de ese segmento era la 1250. Ahora se lanzó a nivel mundial, y esperamos tener para principios del 2024 la nueva generación de la 1300 GS. Con el face in para el año que viene vamos a tener un repunte interesante”. Cabe destacar que para el mundo de las motos BMW, dicha moto es el icono número 1 por el motor Boxer y gran cambio que experimentó respecto a la 1250 GS. “En lo personal espero con ansias para probarlo porque ya hablan de un vehículo que ha evolucionado mucho”, dijo.

Como cierre, expresó su positivismo en cuanto al cambio que todo lo que se viene puede producir en el mercado local: “El cliente de motos de Uruguay no dista de el de cualquier cliente de Motorrad del resto del mundo: la moto es un estilo de vida, una forma de disfrutar la vida. Gozan de una libertad y un contacto con el entorno que les permite desenchufarse del día a día. La comunidad que hay de motos en Uruguay, tanto BMW como para otras marcas, es impresionante y no me canso de ver gente que se está subiendo y descubriendo este mundo. Soy un convencido de que si logramos que la gente se suba segura y con reglamentación adecuada, va a haber mucha gente que se sume a esta forma de vivir”.

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