Mié 26/10/2011
El gobierno uruguayo quiere actualizar el marco regulatorio de las telecomunicaciones, un sector que así como crece año a año va cambiando el rumbo. Hace un tiempo el senador nacionalista Sergio Abreu abogó por la posibilidad de que las empresas de CATV (“cableras”) puedan ofrecer servicios de acceso a Internet. La moción intenta retomar un tema controvertido en Uruguay: abrir, al menos de forma restringida el mercado de Internet, del que hoy participan los operadores móviles a través de 3G, Antel (con servicios fijos) y Dedicado con su red WiMax.
Luego del naufragio del Plan Cardales que pretendía imponer un “triple play” a la uruguaya, uniendo un paquete de servicios de telefonía, cable e Internet por una tarifa económica, el tema de abrir el mercado de Internet a los operadores de cable (a través del cable módem) vuelve a estar sobre la mesa. José Otero, presidente de la consultora internacional Signals Telecom Consulting, que toma el pulso del sector en América Latina y el Caribe, analiza el futuro del mercado de Internet en Uruguay. El cable módem constituye uno de los principales impulsores de la competencia, tanto en precio como en velocidad de acceso y empaquetamiento de servicios, en los principales mercados de América Latina. En Chile y Brasil, por ejemplo, VTR y NET han llevado sus conexiones a 120 Mbps y 100 Mbps, respectivamente. Qué dice Otero, en nota completa.
Entusiasmados con el éxito de las experiencias de Zaragoza, Shanghai y Algarve (Portugal), a principios de octubre, el Instituto Nacional de Carnes anunció el lanzamiento de la franquicia Uruguay Natural-Parrilla Gourmet, establecimientos donde la parrilla típicamente uruguaya es el centro y el producto principal nuestra carne. Tener una franquicia de esta parrilla cuesta alrededor de US$ 35.000 a lo que hay que sumar la adquisición del producto. Ya hay muchos interesados de distintos países (casi 1.000 contactos), principalmente uruguayos que están fuera del país.